La Comisión Europea (CE) ha publicado una nueva edición del indicador “Women in Digital Scoreboard” correspondiente al año 2019. Este indicador tiene por objeto analizar el grado de desarrollo digital de la mujer en cada uno de los Estados miembros. El objetivo que persigue la CE con este indicador es poner foco en aquellas áreas en las que cada Estado miembro podría mejorar, y realizar un seguimiento de la evolución del desarrollo de la mujer en lo que respecta a la transformación digital de sus actividades. Por último, permite hacer un análisis comparativo entre países que se encuentran en el mismo estado de desarrollo, de forma que sirvan para poner en marcha políticas pública de mejora. El indicador sintético está formado por 13 indicadores, que se agrupan en tres dimensiones: Uso de Internet, habilidades de uso de Internet, y especialistas y empleo TIC.
Se ha seguido una metodología similar a la utilizada por la CE para el cálculo del indicador sintético DESI (Digital Economy and Society Index). En el caso que nos ocupa, cada una de las tres dimensiones utilizadas tienen el mismo peso, y dentro de cada una de las dimensiones los indicadores también tienen la misma importancia, por lo que se les asigna el mismo peso. El indicador se publica en 2019, pero se calcula con datos de 2018, procedentes todos ellos de Eurostat. La fuente principal de datos es la encuesta de uso TIC en hogares que realizan los Institutos de Estadística (INE) de todos los Estados miembros. También, se utiliza la encuesta de población activa (EPA), la encuesta de estructuras salariales, ambas de Eurostat, así como las estadísticas sobre educación que publica Eurostat junto con la UNESCO y la OCDE.
En 2019, España se sitúa en el grupo de países con nivel medio alto de desarrollo digital de la mujer (puesto 9), con una puntuación por encima de la media de la UE (52,7 frente a 50.0). El grupo de los países líderes está conformado, en orden de importancia, por Finlandia, Suecia, Luxemburgo, Dinamarca, Reino Unido, Países Bajos y Estonia. Francia y España lideran el grupo de países de nivel medio alto, seguidos de Eslovenia, Bélgica, Austria, Irlanda, y Alemania. Respecto de las grandes economías europeas, España se encuentra por debajo de Reino Unido y Francia, y por encima de Alemania e Italia. Por dimensiones, el mejor resultado lo obtiene España en la de uso de Internet (puesto 8), seguidos de la dimensión de especialistas y empleo TIC (puesto 10). En ambas dimensiones se sitúa entre los países con un nivel medio alto. En la dimensión de habilidades en el uso de Internet España se encuentra en el grupo de medio bajo (puesto 16).
Respecto a la dimensión de uso de Internet, la puntuación de España supera a la de la media de la UE (59,1 frente a 53,1). Destaca la posición de España en lo que se refiere a la utilización de Internet para formación (cursos online) (puesto 3), y para la participación política y social (consultas y votaciones) (puesto 6). En el lado opuesto, las mujeres españolas están entre las que menos usan la banca on-line (puesto 19). La mayor distancia con los hombres se da en esta actividad, siendo la diferencia de 4 puntos porcentuales entre ambos sexos. En general, la distancia ofrece un balance positivo hacia mayor uso por parte de los hombres en todas las actividades analizadas, excepto en la utilización de Internet para la participación política y social. En esta actividad, las españolas superan en 4 décimas a los españoles. En el caso de las europeas, la distancia entre hombres y mujeres se decanta hacia los hombres en todas las actividades analizadas.
En la dimensión de habilidades de Internet, la puntuación de España (52,5) se coloca por debajo de la media de la UE (53,1). Por indicadores, España se sitúa en el grupo medio bajo en la proporción de mujeres con habilidades TIC por encima de las básicas (puesto 15). Respecto a las habilidades TIC básicas, la posición española es media baja (puesto 17), así como en lo que respecta a las habilidades básicas en el uso de software (puesto 17). En todos los indicadores analizados, la distancia entre sexos se decanta hacia mayores habilidades por parte de los hombres, tanto en España como en Europa.
En cuanto a la dimensión de especialistas y empleo TIC, la puntuación de España (46,4) supera la media de la UE (43,9). Esta buena posición se explica por la posición positiva de España en lo que respecta a la brecha salarial de género de especialistas TIC, que pone a España en el puesto sexto entre los países con menor brecha salarial de género, que, aún siendo grande en España (13%), está por debajo de la media europea (19%). Por el contrario, los otros dos indicadores lastran la posición de España en esta dimensión (y, a su vez, en el DESI global). En el caso del indicador relativo a especialistas TIC, España se sitúa entre los países con un nivel medio bajo (puesto 18). Respecto al otro indicador, porcentaje de graduados en ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas (STEM, por su acrónimo en inglés de los términos Science, Technology, Engineering and Mathematics), España se sitúa en una posición media alta (puesto 12). Lo más llamativo de este indicador es la diferencia entre sexos, siendo esta de 17 puntos porcentuales. De todos los indicadores incluidos en el indicador de desarrollo digital de la mujer, es este de proporción de graduados STEM el que presenta, con diferencia, mayor distancia entre sexos.