Son más de 3.000 millones de personas las que, a día de hoy, se conectan a internet en todo el mundo, y se prevé que el tráfico de datos se habrá multiplicado por diez en el año 2020. Con la implementación del Mercado Único Digital, la propia Comisión Europea estima que se crearían en torno a 250.000 nuevos empleos antes del año 2020 en el seno de la Unión Europea. Si a esto le sumamos el hecho de que las empresas digitalizadas son un 10% más productivas, exportan el doble y duplican la creación de empleos que las empresas que no han abordado su transformación digital, la oportunidad que se nos presenta es incontestable.
España cuenta con unos empresarios valientes, decididos, modernos y emprendedores, y con unas nuevas generaciones sobradamente preparadas, que hacen gala de un uso intensivo de la tecnología. Si a este cóctel le sumamos el talento y nuestras ganas innatas de progresar, tan sólo falta que se establezca el marco adecuado para que, entre todos; empresarios, Administración y ciudadanos, hagamos que el proceso de transformación digital sea una realidad en nuestro país.