En el Informe se utiliza un nuevo conjunto de datos elaborado por la OMC, que tiene en cuenta las distintas formas de suministrar servicios a través de las fronteras y proporciona una nueva estimación del valor total del comercio de servicios. Se analizan las principales tendencias que afectan al comercio de servicios, en particular los cambios demográficos, las tecnologías digitales, el aumento de la renta y el cambio climático. Se estudia también la forma en que el comercio de servicios puede evolucionar en los próximos 20 años y cómo puede contribuir cada vez más al crecimiento y el desarrollo inclusivos.
Según el Informe, los costos del comercio de servicios están disminuyendo, principalmente como consecuencia de las tecnologías digitales, y se espera que esa reducción aumente la participación de los servicios en el comercio mundial. Se concluye que, para que las economías puedan beneficiarse del mayor protagonismo que está adquiriendo el comercio de servicios, será necesario intensificar la cooperación internacional. La publicación también incluye varias contribuciones externas en forma de artículos de opinión.