La automatización, la globalización y el envejecimiento de la fuerza laboral suscitan el debate público y la preocupación por el futuro del trabajo. La sociedad y sus líderes hacen frente al desafío de cómo pueden usar estos desarrollos para fomentar el crecimiento económico, al mismo tiempo que garantizan el trabajo digno, la remuneración justa y la seguridad social adecuada.La revolución digital ha traído consigo su propio conjunto de efectos en el mercado laboral que, considerando la velocidad de la innovación en robótica, el aprendizaje automático y la inteligencia artificial (IA), continuarán en el futuro. Estos efectos están recibiendo una gran atención pública, ya que impulsan los temores sobre la pérdida del trabajo, que, aunque son comprensibles, carecen de fundamento. Estos nuevos trabajos requerirán habilidades nuevas y diferentes. Aunque la creciente demanda de las habilidades STEM duras y de los conocimientos informáticos básicos es bien conocida, también hay pruebas convincentes del aumento de la demanda de habilidades sociales blandas. Es crucial que preparemos nuestros sistemas educativos para estos trabajos del siglo XXI. Además, será necesario crear alianzas públicas y privadas, que sean eficientes, que conecten el mundo laboral con el educativo, y que permitan oportunidades de aprendizaje continuo para apoyar a los trabajadores en sus carreras y ayudarles a hacer una transición segura a los nuevos trabajos.
Los retos de la orientación laboral en el mundo digital
22 abril, 2024
